Aunque la victoria nacional de La Libertad Avanza fue lo suficientemente contundente como para teñir de violeta buena parte del país, el mapa político aún no está cerrado.
Este martes a las 18 comenzará el escrutinio definitivo de las elecciones legislativas y, en al menos ocho provincias, la diferencia entre las principales fuerzas es tan mínima que cada voto podría alterar los resultados e incluso el reparto de bancas en el Congreso.
La provincia de Buenos Aires concentra la atención principal. El oficialismo nacional logró dar vuelta la elección y quedarse con un triunfo ajustadísimo: apenas 0,54 puntos de diferencia , unos 46.600 votos, sobre Fuerza Patria.
En La Rioja, la lista peronista Federales Defendamos La Rioja supera por 621 votos a los libertarios, con más de 2.000 sufragios pendientes. En Chaco, el libertario Juan Cruz Godoy aventaja por 0,75% a Jorge Capitanich, una diferencia que define una banca en el Senado.
En Chubut y La Pampa, los márgenes son de apenas un punto. En ambos casos el reparto de escaños podría mantenerse, aunque un cambio mínimo alteraría los resultados.
Por otro lado, Santa Cruz también llega cabeza a cabeza: el sacerdote Juan Carlos Molina supera por solo 728 votos al libertario Jairo Guzmán, una diferencia que puede definir una banca más en Diputados.
En Río Negro, Lorena Villaverde (LLA) quedó a poco más de 2.000 votos del peronista Martín Soria, mientras que en Corrientes la lista del gobernador Gustavo Valdés aventaja por poco más de un punto a los libertarios, lo que mantiene en suspenso el reparto final.
Más allá de estas definiciones, el escrutinio definitivo no modificará la victoria nacional de Milei, aunque sí podría reordenar la representación en el Congreso y el mapa político que dejó el 26 de octubre.