Un fuerte temporal golpeó San Nicolás y provocó el colapso de parte del escenario principal de la Fiesta de Disfraces. La organización ya había postergado la apertura para resguardar al público.
La tormenta, con lluvia y ráfagas intensas, llegó este sábado por la noche y causó daños importantes en el Autódromo, donde debía realizarse la edición 2025 del evento. El fenómeno se desató cerca de las 23:30, minutos antes del horario previsto para habilitar el ingreso. Como la apertura había sido demorada por el mal clima, no había asistentes dentro del predio cuando comenzaron los vientos más fuertes.
La fiesta estaba programada para las 23:00, pero ante la inestabilidad climática se decidió correr el inicio a la medianoche. La medida se tomó al advertir que el temporal podía intensificarse. Además, la organización dispuso cortar el suministro eléctrico para proteger al personal técnico, trabajadores y prensa. Más tarde, se resolvió reprogramar la fiesta.
En un comunicado emitido alrededor de la medianoche, la producción informó: “Ante las inclemencias climáticas, y siendo la máxima prioridad la seguridad de los asistentes y el ‘staff’, el evento será reprogramado. Los ‘tickets’ serán válidos para la nueva fecha. Para quienes no puedan asistir, se anunciarán en los próximos días las modalidades de reembolso”.
Las ráfagas impactaron de lleno sobre las estructuras instaladas en el Autódromo. El escenario mayor fue uno de los sectores más dañados: parte de su armazón cedió ante la fuerza del viento y varias piezas metálicas, paneles y elementos del montaje quedaron destruidos. Otras instalaciones también sufrieron daños.
El momento de mayor intensidad ocurrió cerca de las 23:30, cuando todavía no se había habilitado el ingreso del público. La postergación de la apertura evitó que miles de personas estuvieran dentro del predio durante el episodio más crítico.
La organización remarcó que las decisiones tomadas, demorar la apertura, cortar la energía y reprogramar el evento, fueron fundamentales para garantizar la seguridad del público y del personal. Las imágenes registradas en el lugar muestran la magnitud del temporal y su impacto directo sobre las estructuras montadas.