En el arranque de la última semana de campaña antes de las elecciones generales, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal apuntó muy duro contra el PJ y advirtió que la situación en la provincia de Buenos Aires "no se trata sólo de 12 años de kirchnerismo" ya que, recordó, "fueron 25 años donde gobernó un mismo partido".
Así, aludió no sólo a la ex presidenta Cristina Kirchner, sino también a los otros dos rivales con tinte peronista que tendrá la lista de Cambiemos el próximo domingo: el líder de 1País Sergio Massa y el ex ministro del Interior y Transporte -y referente de Cumplir- Florencio Randazzo.
En una entrevista en El Trece, junto al primer candidato a senador de Cambiemos Esteban Bullrich, Vidal cuestionó al gobierno K porque "estuvo atravesado de denuncias de corrupción". Y, si bien concedió que "cualquier gobierno, con miles de personas, puede tener un caso de corrupción", responsabilizó a Cristina Kirchner porque "cuando es sistemático y abarca a muchísimos ministros es difícil que la máxima autoridad los pueda desconocer".
Consultada respecto a si Cristina se presenta como candidata por los fueros que le daría acceder a un cargo legislativo, Vidal expuso: "Cuando uno mira las dos listas saca la diferencia. Esteban (Bullrich) no quiere ser presidente, no tiene ninguna causa judicial en trámite y quiere trabajar para la provincia. El resto de los candidatos está buscando usar a la provincia como trampolín como hicieron tantos otros ó está buscando protección".
Y, por último, abordó el último fantasma de los empresarios: un eventual regreso de Cristina Kirchner. "Después fue el resultado de 2017. Y claramente la PASO dejó claro que en la Provincia hicimos una enorme elección y que el caudal político-electoral del kirchnerismo es muy limitado a nivel nacional y muy acotado en la provincia de Buenos Aires, incluso a determinados municipios, porque Cambiemos ganó 101 de 135 municipios"
