Con fuertes críticas al Gobierno, las dos CTA, Camioneros, docentes y canillitas confirmaron el paro nacional para el jueves, con movilización a Plaza de Mayo. Además, le metieron presión a la CGT para que convoque a una huelga general, luego de que la central obrera suspendiera a último momento la reunión con el Ejecutivo. "La política económica es desastrosa", criticó Pablo Micheli, líder de la CTA Autónoma.
"La convocatoria tiene como eje principal el rechazo a un ajuste que se profundiza y que genera paritarias con un techo impuesto, que no son libres, como así también despidos, recorte de derechos y de salarios", dijo el líder de la CTA de la Argentina Hugo Yasky al confirmar la medida de fuerza. Así el sindicalista anunció la convocatoria a un "paro nacional con movilizaciones y abandono de tareas" para este jueves, en una "una jornada de lucha" que incluirá una marcha hacia Plaza de Mayo, donde realizarán un acto a partir de las 16.
Yasky anticipó que en caso de que la CGT decida convocar a un paro general se sumarán todos los gremios que convocaron a la medida de fuerza para esta semana. "Cuanto antes sea esa la convocatoria mejor, de ser posible el próximo 19, ya que hace falta un plan de acción para contener a todas las luchas", afirmó.
Con duros cuestionamientos al Gobierno, Micheli dijo que el país atraviesa por "un contexto muy complicado", que afecta principalmente a los jubilados y a la clase media. "La política económica es desastrosa, pero no estamos dispuestos a aceptar estas condiciones", afirmó. El gremialista explicó que hay "dilación" en la definición de una medida de fuerza de la CGT y que por eso resolvieron confirmar la huelga para esta semana. "No son tiempos de mezquindades, sino de parar por la política económica", dijo Micheli.
Mientras que el secretario adjunto de Camioneros Pablo Moyano anticipó que insistirán en su reclamo de 27% de aumento, contra el 15% que ofrecen los empresarios, y que por la medida de fuerza del gremio este jueves "no se va a mover ni una carretilla". Además anticipó que en la reunión de la CGT el gremio pedirá que se llame a "un paro urgente" para el 19 o el 21 de junio.
De esta manera los gremios le metieron presión a la CGT, después de que la central obrera postergara la semana pasada el anuncio a un paro general, tras la convocatoria y posterior reunión con el Gobierno. Aunque la posibilidad de una medida de fuerza ahora parece mucho más cercana, luego de que la cúpula de la CGT decidiera no asistir a una segunda reunión con funcionarios nacionales. Justamente, con este encuentro, el Gobierno buscaba desactivar una potencial huelga.