A una semana de la cumbre de líderes del G20 en la Argentina, los megaoperativos de seguridad se convirtieron en una de las prioridades para el Gobierno. Ya sea para los mandatarios que se instalarán en la Ciudad de Buenos Aires hasta para los porteños. La ministra Patricia Bullrich aclaró que el oficialismo está preparado para el gran evento y no descartó que puedan surgir episodios violentos.
La titular de Seguridad de la Nación aseguró: "Las circunstancias para que un grupo quiera generar una situación violenta pueden existir". Pero advirtió que los efectivos estarán muy cerca para evitarlo.
Hace una semana, Bullrich le había aconsejado a los porteños aprovechar el feriado el viernes 30 de noviembre para irse de la Capital Federal. "Usen ese fin de semana para irse. La recomendación es que se vayan el jueves porque la Ciudad va a estar complicada", indicó la funcionaria.
Con respecto a estas declaraciones, la ministra explicó que las había dicho por la gran cantidad de cortes de tránsito que iban a realizarse. "La Ciudad va a estar muy cerrada, en especial la zona de la avenida 9 de Julio y avenida Córdoba hacia el norte y la General Paz hasta el puerto de Buenos Aires", aclaró. En esta misma línea, reconoció que otros barrios, como Caballito o Villa Urquiza, no tendrían ningún problema. "Lo decimos en el sentido de que no van a tener casi medios de transporte", insistió.
Sin embargo, resaltó que el Gobierno está preparado para recibir a los principales líderes mundiales. "No va a ser peligro estar en la Ciudad durante el G20. Nos haremos cargo de lo que pase", agregó.
Otro de los puntos sobre los preparativos de la cumbre fue la organización de las manifestaciones. "Vamos a plantear que ir a las marchas con las caras tapadas y los palos son condiciones inaceptables", indicó. Y apuntó que hay grupos que insisten en "hacer pasar de la raya" al Gobierno en cuestiones de seguridad. "Tenemos que poner orden, pero democrático", argumentó.