El actor se encuentra muy enojado con una ex empleada y por esta razón decidió demandarla por una suma millonaria.
Sucede que la mujer, llamada Chase Robinson, estuvo cuatro días viendo Netflix durante la jornada laboral, en vez de dedicarse a su trabajo. Se descubrió que mientras debería estar abocada a las tareas para las que había sido contratada, e decidió hacerse "un tiempito" y disfrutar de nada más y nada menos que 55 episodios de "Friends".
En este sentido, se la demandó por "pérdida de tiempo y malversación de dinero" fue la demanda que le realizaron a esta mujer que hasta abril trabajó como vicepresidenta de producción y finanzas en Canal Productions: la productora de cine del propio Robert de Niro.
Asimismo, en la demanda se especifica que la mujer "desperdició cantidades astronómicas de tiempo mirando Netflix durante las horas de trabajo" y alegaron que "ver programas en Netflix no era de ninguna manera parte o estaba relacionado con los deberes y responsabilidades de Robinson. Lo hacía por entretenimiento personal, diversión y placer en momentos en que le pagaban por trabajar".
Y no solo eso: también se la acusó por realizar "gastos exorbitantes" de hoteles y restaurantes. La compañía alegó que Robinson cargó 21.619 dólares en restaurantes en Nueva York y 32 mil dólares en taxis a las cuentas de la empresa.
¡Tremendo!