Desde hoy, quedó prohibida la venta de los tests rápidos para detectar Covid-19 en las farmacias bonaerenses. El Gobierno de Axel Kicillof considera que esas pruebas son de uso profesional excluyente y que por ese motivo “deben realizarse en laboratorios de análisis clínicos”.
A través de la resolución N.º 1533 publicada en el Boletín Oficial, la Provincia advirtió que habrá sanciones en caso de que se corroboren incumplimientos a la normativa y añadió que esta medida tendrá vigencia mientras perdure la declaración del estado de emergencia sanitaria en el ámbito de toda la provincia por la enfermedad del nuevo coronavirus.
En los considerandos de la disposición, el Ejecutivo provincial recordó que “todos los test para Covid-19 que se encuentran actualmente disponibles son de uso profesional exclusivo y deben realizarse en condiciones e instalaciones adecuadas, por ello son de venta exclusiva a laboratorios de análisis clínicos”. Apuntó, además, “que está claramente indicado en los procedimientos sanitarios Covid-19 que cualquier resultado debe estar cargado en el SISA (Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentina) por un profesional inscripto que sea titular de un laboratorio habilitado por la autoridad competente”.
”En esa línea, unos de los objetivos del sistema SISA es crear la ficha única del ciudadano como eje central para el registro de la información sanitaria, que evidentemente podría violarse si el comprador del producto realiza por sí mismo la prueba”, se señaló.
Cabe recordar que hace poco comenzó a comercializarse en ciertas cadenas de farmacias una prueba rápida de origen chino, y aprobada por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), que en 10 minutos permite saber si una persona está infectada por Covid-19 o no. Si bien es de venta libre, el envase indica que el test lo debe llevar a cabo un médico u otro profesional de la salud.