Camila Blanco y Bruno Gutiérrez son estudiantes avanzados de la carrera de Artes Audiovisuales en la Faculta de Bellas Artes. Juntos, formaron una productora audiovisual independiente llamada “Queñi Cine y Fotografía”. En ella trabajan, por un lado cubriendo eventos y por el otro, realizando cortometrajes y proyectos audiovisuales sin fines de lucro, como lo es ‘Memorias en cruce’, el film que hoy presentan.
Camila, habló con LAPLATA1.com y dio detalles del proyecto que busca acercar a los platenses aún más a las fantásticas historias que la ciudad posee. “Memorias en Cruce es una película de suspenso/terror que narra varias historias sobre leyendas de la ciudad de La Plata, ficcionadas y que mezclan el pasado con la actualidad. La empezamos a filmar un año antes de la cuarentena y terminamos sólo dos fragmentos de la película donde narramos la historia de la “Bruja de Tolosa”, y la historia de tres chicas que van descubriendo lugares misteriosos de La Plata como son el ombú fundacional, la usina abandonada de Berisso, las calles de Villa Elisa y la piedra fundacional de Plaza Moreno”.
“La otra historia que casi terminamos de filmar se desarrolla en uno de los chalets alemanes del barrio San Jorge en Villa Elisa, que tienen más de 200 años, y donde pasan una serie de hechos paranormales”, continuó Camila y agregó, “por la pandemia tuvimos que frenar los rodajes, tanto por la seguridad de nuestra salud, como también por un tema de fondos, ya que la película la estábamos financiando nosotros mismos”.
En este momento, y con el amor que genera hacer algo que realmente los apasiona, Camila demostró en su voz mucha felicidad y entusiasmo, y a partir de allí, comenzó a brindar detalles de cómo fue que se les ocurrió encarar semejante proyecto. “En una de las materias de 4to año de la carrera, junto a otros compañeros, comenzamos a formar la idea de hacer una película que se relacionara con La Plata. Sobre todo poder hacer una película que cuente las historias mágicas y misteriosas que siempre escuchamos de la ciudad pero que no todos conocen”, dijo Camila.
En el 2019, este grupo de jóvenes estudiantes realizaron un cortometraje que llegó a salas de Buenos Aires y encendió la llama de lo que hoy es Memorias en cruce, y así lo mencionó Blanco: “Nos incentivó un montón un corto que pudimos filmar en el set de la facultad y fue presentado en el festival “Buenos Aires rojo sangre”, fue nominado a mejor cortometraje internacional”, mencionó.
Una vez fijaron el objetivo, el grupo comenzó a realizar las debidas investigaciones asistiendo al museo Dardo Rocha, haciendo una visita guiada por el cementerio de la ciudad y leyendo diarios y artículos de época en distintas bibliotecas de la ciudad. “Terminamos llegando a un montón de lugares e historias que no conocíamos y nos entusiasmó mucho. Terminamos escribiendo mucho más porque decíamos ‘hay un montón que no conocemos de nuestra propia ciudad’”, expresó la joven.
“El proceso de toda la investigación para la película nos llevó muchísimo tiempo. El plazo que en un principio nos propusimos fue empezarla y terminarla en 2019, pero al ver tanta información decidimos demorar un poco más para que quede realmente buena y podamos abarcar todo esto. Obviamente al año siguiente nos agarra la cuarentena y tuvimos que frenar, en realidad entre comillas, porque la verdad es que nosotros seguimos buscando nuevos guiones y distintas cosas con las cuales concluir con el film. Además fuimos editando lo que ya teníamos grabado y llegamos a hacer el Teaser (adelanto)”, comentó.
El proyecto de estos estudiantes dejó de ser un trabajo de la facultad para pasar a ser un proyecto interesante de película sobre la cultura de una ciudad minada de historias, lo que generó que los demás partícipes, compañeros de la carrera, abandonaran el proyecto y sólo quedaran Camila y Bruno al mando. A pesar de esto, nada los detuvo a seguir adelante.
“Nuestra idea es, más que nada, que la gente conozca el proyecto porque la idea principal era dar a conocer un poco más sobre lo que es la cultura platense y todas sus historias”, explicó Camila y continuó, “por otro lado, si alguien también se quiere sumar apoyando al proyecto con la financiación estaría buenísimo, porque al ser dos nos cuesta y mucho cubrir todos los gastos de una película”.
Ya finalizando, la joven estudiante de Artes Audiovisuales dejó una pequeña anécdota sobre lo divertido que fue para ellos el proceso de filmación de la película. “Hay una foto que está Bruno y mi papá en una moto porque en unas de las escenas tuvimos que filmar un seguimiento a las tres actrices andando en bicicleta, y Bruno se tenía que sentar dado vuelta sosteniendo la cámara y tuvimos un par de errores con la filmación, pero que finalmente los planos quedaron buenísimos y nos sirvió, así que nos reímos mucho y fue muy divertido, já!”.
Por último, Camila decidió agradecer a todos los que son y fueron parte de “Memorias en cruce”, “quiero agradecer, especialmente a los actores y sus familias que nos tuvieron un montón de paciencia, la verdad que fue un lujo trabajar con ellos, muchas actrices fueron muy pequeñas y la verdad que fueron unas genias. Y también agradecer a los artesanos de la feria de plaza Italia que nos prestaron para usar los equipos y nos dejaron pasar a filmar a una de las esclusas de agua de la ciudad que está en el subsuelo de la plaza y aprovechamos para hacer ‘como una especia de pasaje al infierno’”, concluyó la joven.
Memorias en cruce promete ser una obra audiovisual con un aporte cultural muy alto para la ciudad de La Plata, el proyecto continúa en proceso y sus creadores eligen no ponerse plazos en cuanto a su estreno. A pesar de ello, ya dejaron a disposición el primer adelanto de lo que será la película. Además, invitan a todos a seguir sus redes sociales para estar al tanto de la evolución del film.
