Esta mañana, el Tribunal Oral Federal Nº 1 condenó a prisión perpetua a los genocidas Miguel Etchecolatz y Julio Cesar Garachico por el secuestro y tortura de siete personas en el Centro de Detención Clandestino Pozo de Arana.
Entre las personas torturadas, se encuentra Jorge Julio López, quien testificó contra Etchecolatz en el año 2005, y que luego fue desaparecido por segunda vez, el 18 de septiembre del 2006. En sus testificaciones, entre otras cosas, reconoció a Garachico como el jefe del “grupo de los picaneadores”, que ejercían torturas en Arana.
Esta es la novena prisión perpetua que suma el genocida Miguel Etchecolatz, mientras que Garachico sumó su segunda condena a prisión perpetua, ya que antes había sido juzgado por delitos de lesa humanidad cometidos en el centro clandestino de detención “La Cacha”.
En el caso de Garachico, que cumple arresto domiciliario, seguirá la audiencia desde su casa en la ciudad de Mar del Plata. Antes de que escuchar el veredicto, los imputados harán uso de su derecho a pronunciar algunas palabras, detalló una fuente del Tribunal.
Este juicio, que finalizó este viernes, comenzó el 30 de agosto de 2021, cuando se realizó la primera audiencia, en la que Etchecolatz hizo uso de similar derecho y, como suele hacer en estas circunstancias, rechazó la legitimidad del Tribunal que lo juzga.
Vale resaltar que los familiares presentes decidieron levantarse y abandonar la sala por el enojo provocado por la falta de justicia, "esperabamos que cumpla la condena en una carcel como corresponde, no puede ser que le hayan dado prisión domiciliaria" expresaba uno de los presentes.
Con respecto a la sentencia, la cual generó indignacion, Ruben, hijo de Julio Lopez, expresó, "ver que termina de esta manera genera más bronca. Mucho dolor pero mientras más dolor más lucha" expresaba Ruben, hijo de Julio Lopez.
En ese sentido, la abogada querellante y represéntate legal de Derechos Humanos, le comentó a LAPLATA1.com que, “fue una sentencia que muestra las dificultades que tiene esta jurisdicción desde hace muchos años, y que además muestra la ausencia de jueces titulares. Esto lo que genera es que es muy difícil construir alguna jurisprudencia de la jurisdicción y en esta ciudad la vara está muy alta”.
Por último agregó, “lo que sucedió fue que se vio un retroceso. Ahora viene la instancia de Casación y presentaremos una apelación”.
