Pasadas las siete de la tarde la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) realizó un operativo de control sobre una empresa que se dedicaba a la minería de criptomonedas. La cual funcionaba en un predio que estaba declarado como metalúrgica, su documentación no justificaba las 142 máquinas para el minado de dinero virtual.
Tras el operativo, el cual se basó en un relevamiento de equipos y documentación, se determinó la existencia de la explotación dentro de un establecimiento vinculado a otra firma, la cual declaraba realizar otras tareas que las encontradas en la fiscalización. De esa forma camuflaban el excesivo consumo de energía eléctrica y también la realidad económica de la empresa.
Las 142 máquinas encontradas se conformaban por 1.355 placas de video, situación esta que la sociedad investigada no podría explicar ya que no contaría con el respaldo patrimonial suficiente para la adquisición de tales equipos.
El objeto de este operativo es verificar la correcta declaración de activos, el origen de los fondos para su adquisición, los ingresos derivados de la actividad, identificar las billeteras virtuales en las que se depositaba el dinero y con eso a sus beneficiarios.
