Carlos Eduardo Robledo Puch, el asesino serial más conocido de la Argentina, podría salir de la cárcel para alojarse en un asilo ancianos, luego de pasar medio siglo detenido tras recibir una condena a cadena perpetua debido a once asesinatos que cometió.
Tras rechazárseles varios pedidos de libertad condicional debido a sus problemas de salud y a su edad, ya que tiene hoy 70 años, podría ser liberado de la cárcel de Olmos y alojarse en un asilo de ancianos de la localidad de San Nicolás, en el extremo norte de la Provincia de Buenos Aires, en la ribera del Paraná.
Según indicó su abogado, Jorge Alfonso, dos mujeres propietarias de la residencia para adultos ofrecieron albergarlo y garantías para su cuidado, y el propio Robledo Puch dio el consentimiento para ser trasladado a ese lugar.
“En estos días voy a presentar los requisitos que me pidió en diciembre el Juez de Ejecución Penal de San Isidro; se hará una constatación y después, calculo, se arbitrarán los medios para que Robledo Puch vaya a esa residencia”, explicó el letrado.
Ello podría ocurrir luego de las numerosas denegaciones de libertad condicionales, determinadas por pericias psicológicas y psiquiátricas negativas. De hecho, cuando en 1980 fue condenado, amenazó al jurado: “Algún día voy a salir y los voy a matar a todos”, dijo.
Los jueces lo encontraron entonces culpable de diez homicidios agravados, un homicidio simple, 17 robos y dos casos de abuso deshonesto, por lo que la sentencia fue de cadena perpetua. Tenía apenas 20 años cuando fue detenido, el 3 de febrero de 1972.
