Luego de lo que fue el saqueo de una vivienda en Ensenada, la cual le pertenecía a una mujer acusada de estafadora, siguen las investigaciones para determinar los lazos y conexiones de la protagonista con la estafa piramidal.
Ahora, se intenta dar, en caso de que así sea, con las personas que están por encima de la acusada, de 22 años, de nacionalidad boliviana.
La denuncia fue presentada por la Municipalidad de Ensenada en la Superintendencia de Investigaciones de Delitos Complejos y Económicos, con sede en Berazategui.
Tras los desmanes ocurridos días atrás, ahora son varios los vecinos que habrían caído en esta estafa, que están dispuestos a dar testimonio.
Ahora, gracias a nueva información, los investigadores estiman que podrían llegar a dar con más personas involucradas a partir de los datos de las cuentas que recibían las inversiones de estos vecinos. Creen que la cantidad de damnificados puede ser de 5 mil personas.
Por lo pronto, instaron a que los afectados continúen acercándose a declarar para poder contar con mayores datos.
LA VOZ DE LOS AFECTADOS
“Ella nos decía que supuestamente íbamos a multiplicarlo por el doble”, reveló Lautaro, una de las personas afectadas, pero en los últimos días comenzaron a “pisar” los pagos e iban corriendo la instancia del pago.
“Ahora me encuentro que la plata no la vamos a ver. Yo desconfiaba, pero muchos conocidos me decía que todos cobraban”, agregó. “Hubo gente que se les pagó; a la gente que menos plata tenía la caminaron para devolverle a los que más habían invertido”, sostuvo Lautaro.
“Yo a ella la conocía, desde chiquita, iba a la Escuela 4 industrial. Me parte el corazón que me hayan traicionado así. Me defraudaron como vecinos. Hubo gente que vendió motos y puso millones”, lanzó terriblemente conmocionado.
Otro de los estafados fue Néstor, quien precisó: “Yo tengo cáncer. Desde julio no trabajo, tuve dos operaciones, e invertí la plata porque necesitaba pagar cuentas”.
“Y ahora me encuentro con esta estafa. Media Ensenada estaba metida con esto. Yo tengo muchos amigos que venían cobrando. Lo poco que tenía lo invertí. Mi hijo hace poco cobró. En una semana lo duplicaban, me decían. Hubo gente que invirtió 12 millones de pesos”, contó Néstor.
“Ella me decía que la plata estaba, pero que lo iban a pagar en enero por un problema en sus cuentas. Pero yo no podía esperar. Quedé en la lona como mucha gente”, completó el damnificado.
