

Una familia lleva varias semanas de angustia por un tonto descuido cuando disfrutaban de la playa en Punta Lara.
Todo sucedió el 29 de enero, en medio de la ola de calor. Habían ido a disfrutar de la jornada con otra familia amiga de Santiago del Estero.
Pero en el regreso sucedió un error que todavía no se perdonan: su caniche, Kerim, nunca subió al vehículo y quedó en la playa. Volvieron pero ya no estaba.
“Nos subimos al auto y como éramos muchos pensé que estaba del lado contrario mío ya que jamás usa correa y abrís la puerta del auto y es el primero en subir”, comentó en diálogo con LAPLATA1.com su dueña.
Recién cuando llegaron a la casa, ubicada en Berisso, notaron que el perro faltaba: “Es blanco de cola cortita, es macho y cuando se agita hace como que va a vomitar”.
“Desde ese 29 enero publiqué en diferentes grupos y hasta ahora no tuve novedades de él. He ido a ver y me han mandado videos parecidos pero nada, lamentablemente no tuve suerte aun de encontrarlo”, explicó.
“Me quiero matar por un maldito descuido. Imagínate que siempre salía con nosotros hace 10 años. Por confiarme me pasó esto. Pobrecito”, completó la dueña, que dejó un teléfono de contacto ante cualquier información porque todavía no bajan los brazos: 221 419 0918.