
En una alerta epidemiológica reciente, el Ministerio de Salud de la Nación confirmó la existencia de cuatro brotes activos de sarampión en el país, específicamente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), la provincia de Buenos Aires y San Luis. La situación es preocupante: se han notificado más de 2.000 casos sospechosos, y más de 500 continúan en investigación por su complejidad.
El titular de la cartera sanitaria, Mario Lugones, remarcó la necesidad urgente de reforzar la vacunación, especialmente en niños de 6 meses a 4 años, donde la cobertura con la vacuna triple viral apenas alcanza el 20,4% en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Esta vacuna es clave porque protege contra el sarampión, la rubéola y las paperas, y está incluida en el Calendario Nacional de Vacunación, por lo que es gratuita y obligatoria.
El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa que puede generar complicaciones graves, sobre todo en menores. Los síntomas más frecuentes incluyen fiebre alta, erupciones en la piel, tos, secreción nasal y conjuntivitis.
Las autoridades sanitarias insisten en la importancia de completar los esquemas de vacunación en tiempo y forma, tanto en la infancia como en la adultez. También recomiendan a quienes no estén seguros de su estado inmunológico consultar con un profesional para evitar la propagación del virus. La prevención, recalcan, sigue siendo la herramienta más eficaz frente a este tipo de enfermedades.