El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, difundió una carta pública dirigida al presidente Javier Milei, en la que cuestionó las consecuencias del modelo económico nacional y reclamó una relación más federal entre el Gobierno central y las provincias. El mandatario provincial advirtió que las políticas de ajuste están provocando “recesión, caída del consumo y angustia social”, y pidió al Presidente que “gobierne para todos los argentinos, dentro de la Constitución y con respeto al federalismo”.
En el texto, Kicillof sostuvo que el plan económico basado en “mantener un dólar bajo y una recesión prolongada para contener los precios” fracasó, y que los recursos financieros aportados por capitales extranjeros solo sirvieron para “calmar a los mercados”, sin resolver los problemas de la vida cotidiana. Además, calificó de “vergonzosa” la supuesta intromisión de funcionarios y empresarios estadounidenses en la política argentina durante la campaña electoral.
El gobernador también denunció que el “superávit fiscal” anunciado por la administración de Milei se consiguió mediante “la quita ilegal de fondos a las provincias”. Según precisó, Buenos Aires dejó de percibir recursos de programas nacionales de seguridad, educación, infraestructura y jubilaciones, lo que habría generado una deuda de más de doce billones de pesos. “La provincia aporta el 40% de la recaudación nacional y recibe apenas el 7%. Eso no es austeridad: es injusticia estructural”, afirmó.
Otro de los ejes del mensaje fue el reclamo por la falta de diálogo político. Kicillof criticó que el Presidente no convocara a todos los gobernadores a las últimas reuniones con mandatarios provinciales, y advirtió que “las provincias excluidas representan más del 40% de la población argentina”. En ese sentido, pidió coordinar políticas públicas que permitan enfrentar la emergencia social y reactivar la producción.
El gobernador bonaerense remarcó que su administración enfrenta un aumento sostenido de la demanda social y que los municipios están sosteniendo con esfuerzo las necesidades básicas de la población. “En los comedores escolares y comunitarios reciben alimento más de cuatro millones de bonaerenses y la necesidad crece día a día”, detalló, al tiempo que pidió al Gobierno nacional “no desertar de sus responsabilidades” en áreas como salud, educación, trabajo y asistencia social.
Finalmente, Kicillof cerró su mensaje con un llamado al diálogo y a la cooperación institucional. “Presidente Milei: los argentinos la están pasando mal. Le pido que escuche, que corrija y que dialogue. No con los mercados, sino con la gente. El futuro de la Argentina no se construye con odio ni sometimiento, sino con respeto, cooperación y amor a la Patria”, concluyó.