A los 11 años cebaba mates a sus hermanos cuando cocinaban por el Cementerio de La Plata, mamó todo y ahora su vida es el pan
Sebastián aprendió de sus hermanos desde muy pequeño y hasta su señora es del mismo palo. En el 2013 decidió dar un vuelco en su vida y la pelea a pulmón. Eso sí: siempre rodeado de panes



