
La genética tiene un papel fundamental en el desarrollo de nuestros hijos pero obviamente, contribuye la alimentación y los hábitos saludables que les inculquemos.
Si la madre y el padre son altos, es probable que el hijo también lo sea. Si los dos son bajos, el niño será seguramente tenga su misma altura. Según la Dra. Fernanda Freire, pediatra brasileña y autora del blog Seu Pediatra, no es necesario esperar a que se hagan adultos para descubrirlo.
Existe una fórmula simple y bastante antigua para estimar la altura de tus descendientes. Fue creada por el birtánico James Tanner, pero hay que considerar que tiene un margen de error de 10 cm.
Fórmula de la altura Para los niños
Sumá la altura del padre y la de la madre. Sumale 13 y dividí el resultado por 2. Por ejemplo: La madre mide 1,60 y el padre 1,80 (160 + 180 + 13 = 353/2 = 176,5) O sea, el hijo alcanzará aproximadamente 1,76 m.
Fórmula de la altura Para las niñas
Sumá la altura del padre a la altura de la madre. Restale 13 y dividí el resultado entre 2. Por ejemplo: La madre mide 1,60 y el padre 1,80 (160 + 180 - 13 = 327/2 = 163,5) O sea, la hija tendrá cerca de 1,63 m.
Hay que decir que los estudios relatan que la genética contribuye con el 70% de esta cifra, pero factores como el sueño, la alimentación y la práctica de actividad física influyen bastante y son muy importantes para que los niños crezcan fuertes y sanos.