El cerebro es, sin dudas, el órgano de nuestro cuerpo que más trabaja, al igual que el corazón: por eso es necesario ejercitarlo.
En este sentido, Catalina Hoffmann, fundadora Vitalia y creadora del Método Hoffmann, un tratamiento neurológico para adultos mayores, aconsejó en diálogo con el portal Vixmujer.com, ejercitar nuestro cerebro con estos tips:
1. Descansar bien
El momento del sueño es, justamente, el que usa para fijar los conocimientos adquiridos durante el día, en el que procesa todo lo que ha sucedido durante la vigilia, y en el que se prepara para el día siguiente. Dormir consolida la memoria y nos ayuda a tener las ideas más claras.
2. No hacer nada
Pasar ratos de tu tiempo sin ninguna ocupación en particular le da espacio a tu cerebro para que los pensamientos fluyan por donde quieran, y eso sirve para establecer nuevas conexiones neuronales.
3. Hacé ejercicio
El ejercicio es clave para mantener el cerebro activo. Ejercitarte a diario activa tu circulación y ayuda a que el cerebro se oxigene, además de liberar hormonas que nos mantienen más atentos y relajados. Con 30 minutos al día es suficiente.
4. Darle espacio al juego
El juego nos ayuda a desarrollar muchas capacidades, como la imaginación, el entendimiento de las reglas, la socialización, etc. Pero tal vez no eres consciente de que jugar también es bueno para los adultos. Nos llena de estímulos, desarrolla nuestra creatividad, la concentración, entre otras muchas habilidades.
5. Cuidate de alimentos demasiado procesados
Los alimentos hiperprocesados no solo son malos para la figura, también le hacen daño a nuestro cerebro. Lo hacen ralentizarse y en general no aportan los nutrientes necesarios para que sus habilidades se desarrollen.
6. Conectar con otros
Estar con otras personas es medicina para el cerebro. Después de todo, somos animales sociales. Construir relaciones sanas es un verdadero placer para nuestro cerebro, y lo ayuda a mantenerse sano y joven.
7. Meditá
La meditación es una herramienta poderosa para mantener al cerebro calmado y en forma. También colabora a que sintamos menos dolor y ayuda a controlar el estrés diario.
8. Enfocate en metas
El cerebro es, después de todo, un músculo. Y como tal, nada mejor para tenerlo sano y eficiente que entrenarlo. Una genial manera de hacerlo es ponerse metas. No hace falta ser muy ambicioso en esto, basta con un objetivo pequeño a cumplir todos los días. Se trata de formar pequeños hábitos.