Con las ventas cada vez más bajas, las marcas propias se volvieron la jugada de último recurso de los supermercados
Un informe muestra cómo los comercios intentan hacerle frente al derrumbe del consumo. Mientras tanto, por la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, los ciudadanos cambiaron de forma drástica sus hábitos de compra