El efecto psicológico del boleto a 9 pesos

Opinión 08/04/2018 . Hora: 08:30
El efecto psicológico del boleto a 9 pesos

El pasado lunes se subió una señora al ramal 11 del colectivo Norte y pidió al chofer un boleto de $8.25. Sin responder, el conductor le marcó 9.25 en el visor. La mujer miró extrañada y preguntó: ¿Otra vez aumentó? "Sí, desde ayer, un peso más", le contestó el hombre.

El 1 de Abril comenzó a correr el segundo aumento del año. Pero eso no es todo: en junio volverán a subir los micros y trenes del área metropolitana. El boleto mínimo llegará a los 10 pesos. ¿Y allí se queda? En la conferencia de prensa del 3 de enero, Guillermo Dietrich no confirmó que esos sean los valores finales del 2018.

SHIITAKE SUSHI AND WOK LA PLATA 300 x 300

A diferencia del 2016, cuando el pasaje mínimo se duplicó (pasó de 3 a 6 pesos), ahora el gobierno decidió aplicar un dudoso gradualismo para el transporte público. La suba fue en tres tramos: febrero, abril y junio. El incremento más fuerte fue en febrero: de 6 a 8 (33.3%); el reciente 1 de abril creció a 9 (12.5%), y en junio alcanzará los 10 (11.1%).

¿Por qué dudoso? Está claro que el objetivo del gobierno es que esas subas no sean vistas como un gran tarifazo de shock. Los tres escalones, en la teoría, le darían más margen al usuario para acomodar sus cuentas personales. 

MLP

Sin embargo, parecería ocurrir lo contrario arriba de los colectivos. Al igual que la señora, muchos otros insultaron por lo bajo tras enterarse del aumento cuando pedían el caduco boleto de $8. Y lo mismo pasará el primero de junio: habrá otra batería de malhumores. 

Este gradualismo supone que la gente tiene información perfecta: conoce todo el cronograma de aumentos tarifarios y, a partir de ello, planifica como serán sus gastos. Pero muy pocos recordaban que el primero de abril aumentaba el transporte público. Muchos menos que subirá de nuevo en dos meses.

CABA - DENGUE

Maquiavelo decía que el gobernante debe dar las malas noticias todas juntas, mientras que las buenas noticias tenían que darse en dosis pequeñas para aprovechar su impacto positivo. El gradualismo en el boleto de colectivo tiene ese problema: "¿Otra vez aumentó?", es la pregunta recurrente de los pasajeros. No son aumentos fuertes, es cierto, pero la gente prioriza la mala noticia al "tamaño" de la mala noticia. 

En resumen: ¿Es preferible una gran mala noticia en un solo día o pequeñas malas noticias en varios tramos?

El boleto de colectivo había quedado retrasado en diciembre de 2015 cuando costaba solo 3 pesos. ¿Cuánto debe valer en 2018? A fines de la década del noventa, cuando el dólar valía un peso, el pasaje mínimo costaba $0.75. Si dolarizamos el boleto y tomamos que el valor de la divisa es $20.50, actualmente el boleto debería costar $15.37. 

Pero inclusive ese valor está subestimado porque la inflación corrió más rápido que el dólar en los últimos 20 años. Por ejemplo, el aumento de los salarios de los colectiveros fue superior al aumento del precio del dólar. Esos costos en pesos no se reflejan correctamente con una dolarización del boleto. En conclusión: el boleto podría costar más de 16 pesos si se sigue la lógica pre-2002.

Esa diferencia entre el boleto actual de 9 pesos y el "boleto dolarizado" de 16 pesos está cubierta por un montaña de subsidios del gobierno nacional. "Resulta menester disponer medidas que en forma inmediata y efectiva aseguren los mecanismos de financiación adecuados sin que ello implique mayores costos para el usuario del servicio", decía la resolución del 2002.

Aquel gobierno también brindó cupos de gas oil diferencial para las empresas con el objetivo de reducir costos y que no haya necesidad de un traslado a los precios. A partir del 2008, ese esquema de congelamiento tarifario se hizo insostenible y se produjeron algunos aumentos, pero nunca alcanzaron a restablecer precios similares a los de los noventa.

Por último, hay un problema adicional con el transporte público: esta montaña de subsidios solo corresponde para el AMBA, lo que generó una fuerte distorsión con el resto del país. En el resto de las provincias, los gobiernos locales hacen esfuerzos por subsidiar el sistema, pero claramente esos desembolsos son muy inferiores a los que puede establecer un Estado Nacional. De allí que en el interior haya boletos que van desde los 13 a los 18 pesos.

Dietrich anunció que esa brecha se cerraría en 2021. ¿Con gradualismo o tarifazos? 

TWITCH CADENA COOL
Dejar un Comentario