Uno de los deterioros más usuales y preocupantes para las personas en general, es el deterioro cognitivo. Este declive intelectual es causado por diversas situaciones, el envejecimiento es la más común, pero está perdida paulatina de cognición también se presenta cuando hay presencia de enfermedades psiquiátricas, eventos o enfermedades cerebrovasculares o enfermedades degenerativas, como la demencia o el Parkinson.
El decremento de al menos una de las funciones cerebrales trae consigo consecuencias en la forma en que se desarrolla la memoria (ya sea al largo o corto plazo), la orientación, el pensamiento abstracto, el lenguaje, el juicio y razonamiento, habilidades matemáticas y viso -espaciales, sin mencionar que la capacidad de aprendizaje no volvería a ser la misma.
Resolver por completo como parar este deterioro en la actualidad resulta una tarea imposible, pero lo que sí podemos hacer es ralentizarlo. Existen muchos ejercicios que ayudan a mantener alerta al cerebro, así como también existen alimentos que aportan vitaminas y minerales que favorecen en gran medida los procesos cognitivos y contribuyen en la salud del cerebro.
Recientemente, en la Universidad de Harvard se ha descubierto que una enzima que se encuentra en muchos alimentos que consumimos cotidianamente, la cual se divide en varias subespecies, la Vitamina B. Existen varias y cada una ayuda en diferentes formas:
Vitamina B1 o tiamina: esta es auxiliar para que nuestras células y nuestro metabolismo consigan la energía correspondiente para funcionar. Cabe mencionar que el cerebro es el órgano que más energía consume, por ende, es un gran apoyo para su funcionamiento.
Vitamina B2 o riboflavina: esta enzima es favorable para el desarrollo de nuevas células, y para la separación de grasas y medicamentos, para la producción de energía.
Vitamina B3 o niacina: esta vitamina produce sustancias como el colesterol y grasa que el cuerpo termina usando como energía para el funcionamiento de nuestros órganos. Esta usa un aproximado de 400 enzimas para realizar dichas acciones. También es un bien antioxidante, lo que es benéfico para reducir inflamaciones.
Vitamina B5 o ácido pantoténico: la función de esta vitamina es crear un compuesto llamado Coenzima A, la cual se encarga de hacer y deshacer ácidos grasos para adquirir energía.
Vitamina B6 o biotina: esta tiene como función la regulación de las señales que usan las células para una eficiente y rápida comunicación en todo el cuerpo.
Vitamina B9 o folato: este ayuda en la salud neurológica, y mejora el manejo de los neurotransmisores. También ayuda en la desintoxicación celular.
Vitamina B12 o cobalamina: ayuda en la formación de glóbulos rojos y en nuestro ADN, también favorece al sistema nervioso. Sin mencionar que esta vitamina ayuda en la descomposición de la homocisteína, una proteína no benéfica para nuestra salud cardiovascular y que puede llegar a causar incluso demencia.
Existe alimento que de forma natural ya contienen una o varias de las versiones que nos ofrece la Vitamina B.
Para empezar podemos englobar todas las legumbres, las cuales son ricas en esta vitamina, también en verduras con hojas verdes, yogures, incluso en los que no contienen lácteos, los cuales son los más recomendados, el huevo es un alimento más en esta lista con una buena porción de vitamina B, así como las semillas de girasol, y en carnes como el salmón.
