Si hay algo que caracteriza al "sol mexicano" es su carácter. Y así quedó claro en pleno show.
Todo ocurrió en un recital que dio en el Auditorio Nacional de México, en el que el sonido no estaba funcionando como debería.
Tras percatarse de la situación, el propio Luis Miguel comenzó a mostrarse molesto con su sonidista, a quejarse frente a su público que lo miraba atónito.
En un momento de su enojo, les tiró a sus propios asistentes de producción, un ramo de flores blancas destinadas para su público.
Las redes sociales estallaron con videos y fotos de ese momento. ¡Mirá!
Se volvió loco #LuisMiguel.
— ALEJANDRO VILLALVAZO (@VILLALVAZO13) 20 de octubre de 2018
Al cierre de uno de sus conciertos en el @AuditorioMx, @LMXLM aventó con "harto coraje" una rosa a su equipo de audio.
(Video instagram @nelssie_carrillo) pic.twitter.com/ikJnEjhgQS